Las mujeres indígenas, tienen un importante papel en la transformación de los sistemas alimentarios actuales, contribuyendo al acceso y control equitativo sobre la tierra, el agua, las semillas, la pesca y la biodiversidad agrícola de los que producen alimentos. Sin embargo, a menudo se subestima su importante contribución a la producción y obtención de alimentos, la gestión de los recursos naturales y su capacidad para obtener ingresos mediante estas actividades. La transformación de los sistemas alimentarios deben incluir un enfoque de igualdad de género.  Un sistema alimentario justo, transformador y equitativo en relación con el género es aquel que permite a los países, comunidades, hogares, y a los hombres y mujeres, contar con lo necesario para producir y tener acceso suficientes alimentos para sus familias y poblaciones a través de procesos sostenibles, positivos para el medioambiente y resilientes al clima.[1]. A través del programa Emblemático de Mujeres Indígenas (MILAC) del FILAC creado en 2008 e integrado por organizaciones y redes regionales, el FILAC promueve acciones en favor de los derechos individuales y colectivos de las mujeres indígenas y la transversalización del enfoque de género en sus programas emblemáticos, por lo que con este evento se busca generar un espacio amplio y diverso de participación para recolectar los aportes y recomendaciones de las mujeres indígenas de America Latina y el Caribe hacia la Cumbre sobre los Sistemas Alimentarios.

[1] http://www.fao.org/americas/eventos/ver/es/c/1390778/